Un sketch de Jean-Pierre Martinez
Un personaje está presente. Otro llega con una maleta.
Dos – Buenos días, he reservado en línea un coche de alquiler…
Le entrega al otro un papel, que este último examina rápidamente.
Uno – Muy bien… ¿Puedo ver su licencia de conducir?
El otro le entrega su licencia.
Dos – Aquí la tiene…
Uno – Es una licencia de barco.
Dos – Ah, sí, perdón.
Retoma el primer documento y le entrega otro.
Uno – Entonces… ¿Desea alquilar… un coche fúnebre, ¿verdad?
Dos – Sí, eso es.
Uno – De acuerdo… ¿Y por cuánto tiempo?
Dos – Un día será suficiente.
Uno – ¿Es para acompañar a un ser querido hasta su última morada, supongo?
Dos – Sí, en cierto modo…
Uno – ¿En cierto modo?
Dos – En realidad, es para mí.
Uno – De acuerdo… Y… ¿es para ir…?
Dos – De mi casa al cementerio. Como elegí un ataúd para armar uno mismo, pensé que un coche fúnebre de alquiler, que conduciría yo mismo…
Uno – Por supuesto…
Dos – Dudé en tomar un Uber, y luego…
Uno – Vale. Entonces, imagino que no está interesado en la opción de kilometraje ilimitado, ¿verdad?
Dos – No creo que sea necesario.
Uno – Veo que tampoco ha contratado la opción Asistencia Serenidad…
Dos – Yo… No… ¿Qué es eso?
Uno – Bueno… En caso de avería, nos hacemos cargo de todo, y si es necesario, le proporcionamos gratuitamente un vehículo de cortesía. Bueno… un coche fúnebre de cortesía.
Dos – Yo… No sé… Solo son cinco kilómetros… El riesgo es bastante limitado.
Uno – Ah, ya sabe, por definición, las averías… También pueden ser un accidente.
Dos – ¿Un accidente? ¿Conduciendo yo mismo el coche fúnebre para ir a mi propio entierro?
Uno – Sería realmente mala suerte, lo admito.
Dos – A menos que sea un accidente mortal, por supuesto.
Uno – También puede ser simplemente un pinchazo…
Dos – ¿Un pinchazo?
Uno – No es obligatorio, pero sería más prudente.
Dos – ¿No me diga que la rueda de repuesto también es opcional?
Uno – No, por supuesto… Bueno, creo que no… En fin, usted decide…
Dos – Creo que voy a correr el riesgo.
Uno – En ese caso, aquí tiene las llaves.
El segundo toma las llaves.
Dos – Muy bien.
Uno – Solo me queda desearle un buen viaje.
Dos – Gracias.
Uno – Y… tenga cuidado en la carretera.
El otro sale con su maleta.
Oscuridad.
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Sketch extraído de la recopilación Memorias de una maleta
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