Un sketch de Jean-Pierre Martinez
El primer personaje está allí, al borde del escenario, con una maleta en la mano, ligeramente inclinado hacia adelante y mirando hacia abajo. El segundo llega apresuradamente.
Dos – ¿No me vas a saltar por encima?
Uno – Eh… No… No si puedo evitarlo…
Dos – Perdona, quería decir… ¿no vas a saltar por encima… de la barandilla ?
Uno – Ah… Eh… No… No si puedo evitarlo…
Dos – Qué lástima… O sea, ¡mejor así!
Silencio incómodo.
Uno – ¿Tengo aspecto tan desesperado?
Dos – No lo sé… ¿Y yo?
Uno – Sí, un poco… Parece que acabas de salir de…
Dos – Acabo de salir del dentista.
Uno – ¿Y… te dolió?
Dos – De cierto modo… Me plantó.
Uno – ¿Sales con tu dentista?
Dos – No, quiero decir… Canceló la cita.
Uno – Vale… ¿Y por qué?
Dos – Le dolían los dientes.
Uno – ¿Ah sí? Bueno, es cierto. Siempre me he preguntado a dónde van los dentistas cuando les duelen los dientes.
Dos – Y los peluqueros, ¿dónde van a cortarse el pelo?
Uno – Ya sabes lo que dicen… Siempre son los zapateros los peor calzados.
Dos – De todos modos, siempre me duelen los dientes… ¿Y tú?
Uno – No, a mí los dientes me van bien… Diría incluso que por ahora, los dientes son prácticamente lo único que va bien en mí.
Dos – Entonces, ¿es por eso que pensabas en…
Uno – ¿En…?
Dos – Bueno, en… saltar.
Uno – Mi plan no estaba tan avanzado… En realidad, solo quería asegurarme de que si saltaba, fuera lo suficientemente alto como para tener una oportunidad razonable de acabar con mi vida de mierda. Porque si es para terminar solo lisiado…
Dos – ¿Te imaginas? Estás deprimido, te suicidas y al final, quedas parapléjico.
Uno – Eso sería aún más deprimente.
Dos – Seguro.
Uno – Por eso prefería verificar.
Dos – ¿Estabas haciendo una investigación preliminar, en resumen?
Uno – Exacto.
Dos – ¿Y?
Uno – ¿Qué?
Dos – ¿Es lo suficientemente alto?
Uno – No lo sé… ¿Qué piensas tú?
Dos – No tengo mucha experiencia…
Se acerca y mira.
Uno – Ten cuidado de todos modos…
Dos – Tienes razón, sería demasiado tonto.
Uno – ¿Y entonces?
Dos – No es muy alto… Saltando de cabeza, tal vez…
Uno – Y además es césped.
Dos – Si fuera cemento, al menos.
Uno – El césped es bastante blando. Sobre todo cuando ha llovido mucho.
Dos – Es cierto que últimamente no hemos tenido mucha suerte con el clima.
Uno – No. Es realmente deprimente.
Dos – De todos modos, asegúrate de no fallar. Porque si no, no tendrás una segunda oportunidad.
Uno – ¿Perdón?
Dos – Cuando te disparas, si fallas con el primer intento, siempre puedes compensarlo con el segundo. Solo tienes que apretar el gatillo nuevamente. Pero cuando saltas al vacío…
Uno – Es cierto.
Dos – ¿Te ves subiendo las escaleras con una pierna rota y una fractura en el cráneo para lanzarte de nuevo al vacío?
Uno – No…
Dos – Sé que lo ridículo no mata, pero bueno… hay límites…
Uno – Sí, preferiría morir con dignidad.
Dos – Bueno, tengo que dejarte. Disculpa, pero realmente me duelen mucho los dientes.
Uno – De todos modos, gracias por tus consejos.
Dos – De nada. ¿Sabes dónde hay una farmacia de guardia por aquí? Es para mi dolor de dientes…
Uno – Sí, creo que… Voy a ir contigo… Probaré los medicamentos, mejor…
Dos – Tienes razón… La ventaja de los medicamentos es que si fallas…
Uno – Siempre tienes derecho a una segunda oportunidad…
Salen juntos.
Oscuridad.
Aquellos textos los ofrece gratuitamente el autor para la lectura. Sin embargo cualquier representación pública, sea profesional o aficionada (incluso gratuita), debe ser autorizada por la Sociedad de Autores encargada de percibir los derechos del autor en el país de representación de la obra. En España SGAE, en Argentina ARGENTORES, en Uruguay AGADU, en México SOGEM.
Contactar con el autor : FORMULARIO DE CONTACTO
Sketch extraído de la recopilación Memorias de una maleta
Enlace a la recopilación para comprarla o descargarla gratuitamente (PDF).

Encuentra todas las obras de teatro de Jean-Pierre Martinez en su sitio web:
https://jeanpierremartinez.net